Ben & Jerry’s anuncia dejará de vender en Cisjordania y Jerusalén Este
Ben & Jerry’s anunció el lunes que ya no permitirá que sus helados se vendan en Cisjordania y Jerusalén Este, una medida que llega después de que una ola de críticas en línea apuntara a las ventas de la empresa en esas zonas y provocara el silencio en sus canales de redes sociales durante unos dos meses.
La decisión suscitó reacciones rápidas y variadas, que van desde los elogios de algunos de los que habían presionado a la empresa para que dejara de vender a los colonos, hasta las críticas de que la medida no iba lo suficientemente lejos, pasando por nuevos llamamientos al boicot contra Ben & Jerry’s por parte de quienes apoyan los asentamientos israelíes, incluido el ex primer ministro Benjamin Netanyahu.
La empresa con sede en Vermont, conocida por sus mensajes progresistas en los anuncios y en la marca de helados, dijo en un comunicado el lunes que “creemos que es incompatible con nuestros valores que los helados de Ben & Jerry’s se vendan en el Territorio Palestino Ocupado (TPO)”.
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La empresa dijo que suspendería un acuerdo con un licenciatario que fabrica y vende el icónico helado en Israel y en otros lugares de la región. Un grupo llamado Vermonters for Justice in Palestine ha criticado durante mucho tiempo ese acuerdo comercial, nacido de la amistad entre el cofundador de Ben & Jerry’s, Ben Cohen, y el empresario israelí Avi Zinger en la década de 1980. El grupo de defensa, que lleva 20 años, sostiene que la participación de la empresa en los territorios ocupados va en contra de la misión de justicia social de la que se benefician.
Desde hace tres décadas, Ben & Jerry’s tiene una fábrica autorizada en Israel, que produce y distribuye helados en el país y también vende en los asentamientos israelíes de Cisjordania y Jerusalén Este y los atiende. Ben and Jerry’s dijo el lunes que no renovaría su acuerdo con ese licenciatario, pero que seguiría vendiendo sus helados en Israel “a través de un acuerdo diferente”.
