El Departamento de Salud confirmó que la primera muerte por COVID-19 en la Isla tuvo lugar hoy en el Ashford Presbyterian Community Hospital.
Se trata de la paciente que viajaba en el crucero Costa Luminosa, y que fue llevada en ambulancia a la institución cuando esta nave atracó en Puerto Rico. Según se indicó, a pesar de que se le ofrecieron todos los cuidados médicos necesarios, la presencia de otros elementos de riesgo en su condición impidió su recuperación.
Por otro lado, ya totalizan 21 los casos positivos a COVID-19, tras darse a conocer tres adicionales entre los más recientes resultados obtenidos por el Departamento de Salud y cuatro casos más en el Hospital de Veteranos.
De un total de 30 muestras procesadas ayer en el Laboratorio de Salud Pública, tres de ellas arrojaron positivo a COVID-19 en la Isla. En el mismo laboratorio, 27 pruebas dieron negativo.
Esta vez son tres hombres quienes arrojaron positivo. Todos en la región Metro. Uno de 78 años sin historial de viaje, otro de 73 con historial de viaje y uno de 56 años con historial de contacto con personas del exterior.
En cuanto a los cuatro positivos del Hospital de Veteranos, aún no se ha provisto información demográfica detallada de los mismos ni su historial de viaje, sin embargo más adelante en el día dicha información le será suministrada al Departamento de Salud para que sea consolidada con la que posee la agencia.
Con estas cifras, el total acumulativo de casos del novel coronavirus en Puerto Rico es de 235 pruebas realizadas de las que solo 21 han resultado positivas, 143 negativas y 71 en espera de resultados.
“Debemos tomar con seriedad el hecho de que nuevos casos positivos a COVID-19 siguen surgiendo en nuestra Isla. Por esto, las medidas tomadas por la gobernadora Wanda Vázquez Garced, de aislamiento social, deben ser estrictamente seguidas. Todos tenemos en nuestras manos la capacidad de detener la propagación del virus”, indicó la doctora Concepción Quiñones de Longo, secretaria interina del Departamento de Salud, quien recabó sobre la importancia de continuar asumiendo un rol activo en las medidas preventivas cotidianas para ayudar a prevenir la propagación de enfermedades.
Las más importantes son, el lavado de manos frecuente con agua y jabón al menos por 20 segundos. Si no hay agua, se recomienda la utilización de desinfectante para manos; evitar tocar los ojos, boca y la nariz; quedarse en la casa si está enfermo; cubrirse la boca al toser o estornudar con servilleta desechables y lavarse luego las manos, o toser en el antebrazo cerca del codo. También se recomienda limpiar y desinfectar los objetos y las superficies que se tocan frecuentemente, utilizando un producto común de limpieza de uso doméstico.
