En pañales sistema de intervención temprana mientras aumentan casos de autismo en Puerto Rico
Actualmente, uno de cada 36 niños y niñas tienen un diágnostico de autismo
A pesar de que para el 2020 ya uno de cada 36 niños tenía un diagnóstico de autismo, en Puerto Rico aún no se cuenta con un sistema de intervención temprana para detectar los casos, según la directora ejecutiva de la Alianza de Autismo, Joyce Dávila.
Números de los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos apuntan a que las cifras apuntaban a que una de cada 10 mil personas tenía la condición en 1970, mientras que para el año 2000 se situaba en una de cada 200 personas.
“Nosotros, además, analizamos lo que sería el Child Count del Departamento de Educación. Les pedimos esos datos. Pudiéramos especular que ellos no los analizan. Los tienen, pero no los analizan. Vemos que en los pasados 11 años, la matrícula del Departamento de Educación Especial bajó un 29 por ciento. Asumimos que, por todo lo que pasó en Puerto Rico en estos últimos años, pues, fue una gran parte de la población, como una tercera parte, así que es en línea con lo que se ha dicho en el resto del país. Pero, lo que ha pasado es que el autismo, en ese tiempo, ha subido de representar el 2.6% de la población a representar el 10.43% de la población […] mientras la población de educación especial bajó casi una tercera parte, el autismo subió un 180%, que son 2.8. veces”, indicó Dávila en Sobre la Mesa.
Específicamente, señaló que entre los años académicos 2021 al 2022 y 2022 al 2023 la población de niños y niñas de entre tres a cinco años, y con autismo, aumentó de 1,126 a 1,887.
Actualmente, el autismo es la condición de neurodesarrollo de mayor prevalencia a nivel mundial. Sin embargo, la falta de procesos para atender a dicha población complica el panorama, desde su diagnóstico hasta su intervención temprana. A ello se le añade el factor contaminante del medioambiente y su impacto en el desarrollo de los infantes.
“Ahora mismo tú sospechas que un hijo tuyo tiene este autismo a los dos años y puede ser que espere un 50% más de su vida porque sea diagnosticado, porque a lo mejor hay un año de lista de espera. Entonces, no hay suficientes equipos de diagnóstico. Los planes médicos cubren los diagnósticos a través de los hospitales pediátricos, pero parece que no lo están cubriendo a nivel privado. O sea, que pudiéramos, también, presionar a los planes médicos para que empiecen a cubrir la evaluación de autismo porque hay una cubierta especial de autismo que se puede activar ante la sospecha. Y es con solo un referido del pediatra o de algún especialista. O sea, que es cuestión de que empiecen ellos a diagnosticar más“, añadió al exigir al Gobierno establecer un plan de país.