La presidenta de la Asociación Puertorriqueña de Proveedores de Servicios de Salud y Relacionados a la Educación (APPSSRE), Ruth Concepción, denunció que aproximadamente 30,000 estudiantes de educación especial no están recibiendo servicios de terapias.
Según explica Concepción en entrevista con Sonia Valentín, el gobierno prefiere incumplir con los servicios antes de efectuar pagos por servicios. Esto incurre en una carencia de servicios vitales para miles de menores del sistema educativo puertorriqueño:
En los últimos cinco años, la población estudiantil de educación especial en Puerto Rico ha mostrado una tendencia creciente, representando aproximadamente el 35% de la matrícula total, según datos del Departamento de Educación. Este aumento ha generado una mayor demanda de servicios especializados, como terapias de habla y lenguaje, psicología, educación física adaptada y asistencia tecnológica, entre otros.
Sin embargo, la provisión de estos servicios ha enfrentado desafíos significativos, especialmente durante la pandemia de COVID-19, que obligó a una transición abrupta a la modalidad virtual. Estudios han señalado que esta transición afectó negativamente la continuidad y calidad de los servicios, impactando el bienestar familiar y el desarrollo de los estudiantes.
A pesar de los esfuerzos por mejorar la infraestructura educativa, muchas escuelas continúan enfrentando problemas estructurales y tecnológicos que afectan la implementación efectiva de los servicios de educación especial. Por ejemplo, en algunas instituciones se han reportado deficiencias en el sistema eléctrico, lo que limita el uso de equipos esenciales para el aprendizaje y la terapia.
Además, la escasez de personal especializado y la falta de espacios adecuados para la atención individualizada siguen siendo obstáculos persistentes. No obstante, se han implementado programas como el Año Escolar Extendido y campamentos de verano para mitigar el rezago académico y proporcionar apoyo adicional a los estudiantes con necesidades especiales.
La comunidad educativa continúa abogando por una mayor inversión en recursos y una planificación más inclusiva para garantizar una educación de calidad para todos los estudiantes.