Protector solar: ¿Por qué es necesario usarlo aunque no salgas de casa?
Uno de los productos esenciales para el cuidado de la piel es el protector solar. Pero, ¿sabías que es necesario usarlo incluso cuando estamos en casa? Descubre por qué hay que usarlo siempre en tu rutina de cuidado diario.
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Qué es un protector solar
Como su nombre lo indica, el protector solar funciona para proteger la piel de la acción de los rayos ultravioleta. Hay dos tipos: los rayos UVB y UVA, estos últimos penetran en las capas más profundas de la piel. Los rayos UVB y UVA pueden causar cáncer de piel, envejecimiento prematuro, la aparición de arrugas y manchas en la piel.
Los protectores solares tienen un factor de protección solar (FPS) que varía según la capacidad que tengan de impedir la acción de los rayos ultravioleta en la piel. Un FPS más alto bloquea en mayor porcentaje y en mayor cantidad los rayos UV y la protegen por más tiempo.
Sin embargo, aunque su FPS sea alto, los protectores solares deben ser re-aplicados cada dos horas para que no pierdan su efectividad. También hay que tomar en cuenta que influye la frecuencia de re-aplicación, si son a prueba de agua o si se está en un ambiente al aire libre y hay mucho calor.
Por qué es necesario usarlo siempre
Generalmente, se cree que solo es necesario usarlo cuando vamos a la playa o a la piscina. Sin embargo, es necesario usarlo también en casa. Por un lado, la luz pasa a través de las ventanas y por otro, las pantallas generan luz que también produce fotoenvejecimiento en la piel. De igual modo, en día lluviosos o nublados, para salir al trabajo o salir en general, es importante usar protector solar a diario.
En tu rutina de cuidado diario de la piel, debes aplicarlo y si estás en ambientes donde hay altas temperaturas o vas a la playa o a la piscina debes volverlo a aplicar con más frecuencia. Se recomienda usar protectores con FPS de 30 a 50 para mejores resultados.
El uso frecuente de protectores solares evita la aparición de arrugas, la pérdida de la elasticidad en la piel, el fotoenvejecimiento, las manchas, quemaduras, melasmas y el cáncer de piel. Debido a esto, no dejes de usarlos en tu rutina diaria para proteger tu piel.
Nota original de BocaLista
