Sentencian a hombre que asesinó a su pareja en un cuartel en Morovis
El Departamento de Justicia informó que el victimario se declaró culpable
Luis A. Cruz Santiago, acusado por asesinar a su pareja, Jackeline Santiago Rodríguez, en un cuartel de Morovis el pasado 13 de abril, fue sentenciado a cumplir 109 años en prisión.
La jueza Heidi Kiess Rivera, del Tribunal de Primera Instancia de Arecibo, sentenció hoy, jueves, al victimario a cumplir una pena de 99 años en prisión por el delito de feminicidio y 10 años por dos cargos en virtud de la Ley de Armas, lo que totaliza 109 años de cárcel que cumplirá de manera consecutiva. Además, le impuso 20 años de cárcel por poner en riesgo la seguridad u orden público al disparar un arma de fuego, que cumplirá de forma concurrente.
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El secretario del Departamento de Justicia, Domingo Emanuelli Hernández, informó que Cruz Santiago, acusado por la Fiscalía de Arecibo se declaró culpable en todos los cargos expuestos.
Cruz Santiago admitió los hechos mediante una alegación preacordada con el Ministerio Público, representado por los fiscales Juan Ayala Rivera y Natalia Quiñones Cruz, adscritos a la Unidad Especializada de Violencia Doméstica, Delitos Sexuales y Maltrato a Menores de la Fiscalía de Arecibo.
“Todas las mujeres merecen vivir en un ambiente de seguridad, amor y respeto en nuestra sociedad. Extiendo mi solidaridad con los familiares de Jackeline y agradezco el empeño de los fiscales e investigadores para que este crimen no quedara impune”, indicó Emanuelli Hernández en declaraciones escritas.
Los hechos se dieron en la tarde del 13 de abril en la calle Baldorioty, intersección con la calle Rafael Torres, cuando Santiago Rodríguez, de 39 años y residente en el mencionado municipio, llegó al cuartel municipal para querellarse en contra de su pareja, de 35 años y también residente en Morovis, quien presuntamente formaba parte de un programa de desvío por un caso previo de violencia doméstica.
Tras ser atendida por el sargento Wilberto González, Cruz Santiago le disparó a Santiago Rodríguez en varias ocasiones, provocándole la muerte en el acto.
Acto seguido, el policía Obed Morales, que era el retén del cuartel, repelió la agresión e hirió al victimario, quien fue transportado a una institución hospitalaria de dicho municipio y, posteriormente, referido al Centro Médico en Río Piedras.
Los agentes Oscar Umaña Pérez y José Santiago Pérez, adscritos a la División de Homicidios del Negociado de la Policía de Puerto Rico (PNP), estuvieron a cargo de la investigación.