Cómo resistir realmente la tentación de rascarse la piel cuando pica

¿Qué pasa con el control sobrehumano que tiene la picazón sobre la mente y el cuerpo? A veces, rascarse parece un alivio por el que vale la pena arriesgarlo todo. Especialmente si tienes un problema de salud que te provoca mucha picazón: el eccema.

El cual afecta a 31 millones de personas en los EE.UU. cada año. Y la piel seca y con picazón es el síntoma más común. Puede provocar problemas para dormir, una peor salud mental y otras cosas difíciles que pueden agotar su bienestar.

Pero rascarse no es realmente la respuesta

La liberación breve y placentera que ocurre cuando cedes empeora la picazón. Según una investigación realizada en el Centro para el Estudio de la Picazón de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington en St. Louis, rascarse la picazón puede hacer que le moleste más a largo plazo.

Porque su cerebro libera serotonina, una sustancia química que desempeña un papel importante en las “señales de picazón” de tu cuerpo cuando tocas tu piel. Lo que hace que quieras hacerlo una y otra vez.

Esa investigación se realizó en ratas, por lo que no es totalmente concluyente. Pero otro estudio muy pequeño encontró que los humanos sienten diversos grados de placer cuando se rascan, así que no es de extrañar.

Esas son malas noticias no solo porque es molesto e incómodo tener picazón todo el tiempo. Sino también porque irritar aún más la piel propensa al eccema puede tener consecuencias infernales, como más Inflamación grave e infecciones de la piel, señala la Clínica Mayo. Es un círculo vicioso.

Entonces, ¿qué puede realmente ayudarle a desarrollar un enfoque para evitar rascarse que sea amigable con el eczema?

La mejor manera es a través de tratamientos probados y verdaderos. Como cremas con corticosteroides de venta libre o recetadas. Y otros medicamentos para ayudar a minimizar los brotes. Hable con un dermatólogo como primera línea de defensa.

Muchas estrategias diferentes pueden ayudarte a sentirte mejor (o, al menos, no peor) a largo plazo, pero la clave es la mentalidad. Aquí, los expertos ofrecen sus mejores consejos para burlar el impulso.

Cómo lidiar con la necesidad de rascarse la picazón

Si bien puedes ponerte un par de guantes o sentarte sobre tus manos si esas cosas te impiden ponerte las uñas en la piel. Cambiar la forma en que respondes mentalmente es otra clave para el éxito, dice Sasha Heinz, psicóloga del desarrollo con sede en Pittsburgh.

“Puedes pensar en la necesidad [de rascarte] como si sonara un teléfono. Quieres contestarlo. Te sientes obligado a hacerlo, pero si dejas que siga sonando, eventualmente dejará de sonar”.

Hay que pensar en ello menos como “luchar” contra un impulso, sino más bien como “no responder al llamado” del impulso”, dice Heinz. Esa mentalidad reconoce que la picazón puede seguir apareciendo, pero se trata menos de vencerla y más de poder vivir con ella.

Un método que ofrece Heinz para ayudarle a presionar el botón «ignorar» en su cerebro: cambie su atención a otra cosa. “Distanciate teniendo un ritual de distracción. Cuando sienta la necesidad de rascarse, adopte un comportamiento preparado”, dice.

Heinz recomienda investigar tácticas de distracción y ajustes de comportamiento que son comunes en la terapia de aceptación y compromiso (TAC)

Ésta es una forma de atención de salud mental basada en la premisa de que la incomodidad y el dolor son partes inevitables de estar vivo. Pero la forma en que los afrontamos está más bajo nuestro control.

Ofrece estrategias alternativas para tratar de evitar o combatir estos sentimientos, que en última instancia pueden empeorar la incomodidad y el dolor, según una revisión de 2017 de la investigación sobre TAC.

Este tipo de terapia a veces se usa específicamente cuando una persona está lidiando con malestar físico. La misma revisión de 2017 encontró que TCA mejoraba la calidad de vida de las personas con condiciones de salud crónicas.

Y lo hizo guiándolas a cambiar sus respuestas emocionales a sus síntomas. Algunos de los ejercicios recomendados para modificar su reacción ante el malestar incluyen: masajear su manos, hacer ejercicios de respiración consciente, técnicas de conexión a tierra y levantarse para caminar.

Sin embargo, esta es la cuestión: no vas a tener un dominio perfecto de tu mente en cada segundo. Aunque vale la pena seguir trabajando en ello.

Si, a pesar de tus mejores esfuerzos, todavía realmente quieres rascarte nada te impedirá hacerlo, dice Jeanine Downie, dermatóloga con sede en Montclair, Nueva Jersey

Ella dice que puedes hacer ajustes que hagan menos daño. “Aplique hielo en el área que le pica para evitar rascarse. También aconsejo a mis clientes que se corten las uñas muy abajo para proteger tópicamente la piel inflamada”, agrega. Mantener tu piel hidratada también es clave.

Y está bien pedir ayuda. Trabaje con su médico. Y tal vez incluso con un terapeuta para elaborar un plan de acción para cuando sus síntomas parezcan empeorar. Y recuerde que, esta molestia pasará pronto.